Plataformas sociales, usos y desusos
Hace muchos años que llevo transitando por las Redes Sociales, y sin duda son una de las claves de mi existencia. He conocido clientes, amigos, ciudades y la nunca despreciable referencia online que nunca es diferente al blended on-off de cualquier operativa de futuro. Twitter, Facebook y alguna más que casi no he utilizado, fueron claves en mi desarrollo. Algunas, aún siguen siendo importantes pero los tiempos están cambiando y es difícil analizar cuán de importante han sido y cuán de importante serán en el futuro. Hace unos días analizaba diversas webs de una mediana empresa en la que me incorporé hace meses y los comparaba con los de una multinacional.
Menciones, interacciones y todo eso que la sociedad impone por el uso de las redes sociales, me llamaban la atención en varios puntos: Twitter refiere más acciones si tienes una fundación o hablas de un negocio. Facebook refiere más sentimiento. Google+ te hace dudar eh….»como es de Google…» Entre la razón y el corazón está la analítica: Search Console no duda en activar tus alarmas cuando no terminas de creer lo anterior: las palabras más importantes son el corazón de la empresa, lo que la gente quiere oir su latido cada día, la internacionalización de tus productos algo reñido con las plataformas sociales, y los artículos en los blogs corporativos, vitoreados cuando hablan de las personas que forman la empresa, dejados de lado cuando se presiente que un producto está a punto de aumentar el porfolio de la misma.
Los tiempos son los que son, pero si me buscas paso 1:30 en tu web, si te obligo a entrar 0: 30 y si me convierto en tu amigo 5: 30. Esto me haría comprar material de primera para ser corredor de fondo en este momento, así que tienes que pensar más en las redes sociales que en la lucha por estar en los primeros puestos en internet.
Sino sales muy favorecido, puedes analizar Instagram. Las empresas se tomarán en serio la inversión en esta plataforma con un target que era como twitter en mi épcoca y que ahora son los que deciden la compra de una buena parte de los productos. O te cambias la cara con Snapchat, una plataforma que tan pronto como vienes, te vas. Como en los negocios, estás hoy y quien sabe si mañana también.
La analítica era más fácil hace tiempo, antes de las redes sociales. Entrada, Salida, Rebote, Tiempos y demás medidas cuantificables. Ahora, se unen las redes sociales en las que la cuantificación, empieza por la cualificación de las personas. Y las plataformas que te envían estos insights tienen la tarta tan repartida que tienes que decidir en que parte quieres colaborar………Ah, claro las plataformas colaborativas son esa necesidad social en forma de máscara de carnaval con incisivos económicos.
Con todo este mapa, la necesidad inminente es conocer cuál de estas plataformas está en desuso, cuál aún sobrevive y cuál estará en el futuro. Tus clientes no son los mismos que hace años ni serán los mismo dentro de los próximos, así que no tiene sentido utilizar lo que algún diá te daba subidones cuando alguien te vinculaba, ni tampoco entrar en depresión por dejar ese rastro de una vez por todas…..Eso sí, toma la decisión antes que tus clientes porque ellos ya la tomaron hace tiempo y tú sigues pensando en followers, likes y demás interacciones.