Despues de mi estancia en Roma, y en otro momento en otros paises, me he dado cuenta de una cosa, y es que nuestro nivel hotelero no tiene nada que ver con el resto del mundo. En España se puede encontrar un hotel de cuatro e incluso de cinco estrellas a precios realmente interesantes.En el resto del mundo ,lo que baje de 300 euros, es un hotel en el que te puedes encontrar de todo.

No es de extrañar como se dice en Hosteltur, que la prestigiosa publicación britanica Condé Nast Johansens, haya concedido a cuatro hoteles españoles cuatro de sus premios en diversas categorías.Se conceden doce premios y cuatro han venido para España.Todo un lujo.

Cuando viajas no entiendes la diferencia de porqué un cuatro estrellas debe ser diferente en Londres, Roma o Madrid. Si tienen la misma calificación, deberían tener los mismos requisitos, y sino debería existir una calificación independiente en cada país, porque no se puede standarizar algo que no tiene los mismos standares.Es un vivo sin vivir.

Debería existir un organismo internacional que velase por esto, porque además de sensaciones y malas estancias, no resulta muy coherente que capital contra capital, sea de país diferente o no, tenga diversos atributos en la concesión de su categoría. En los viajes, la estancia es ,al menos para mi, lo mas importante,porque al final comer más o menos comes, pero a la hora de dormir, nuestra exigencia debe ser mayor,de ahi que en relación calidad -precio, y por el interés de la hostelería, debemos alzar la voz sobre este desaguisado internacional, que deja a España en muy buen lugar , con premios y demás, pero lo otro sigue y creo seguirá tal cual.

Arriba foto del Hotel San Carlo, en Piazza Spagna, con una muy buena relación calidad-precio