Estamos acostumbrados  a decir esto va bien o esto no va bien. Llevo tiempo trabajando en ese tema y existe la costumbre de organizar tu cerebro para que piense que si las cosas van mal, a tí también te van a ir mal. Cuando empecé cualquiera de mis objetivos, nunca dije a mitad del día: va a seguir tan mal como empezó, quizás porque no quiero darle un patrón a mi cerebro para que se de cuenta de que no puedo cambiar las cosas, y se aproveche de mi debilidad……

Un solución importante para ello, es pensar en conseguir un objetivo muy importante, porque siempre estarás obligando a tu cerebro a que ese patrón, no tenga un parámetro que pueda dominar. Ayer, un cliente estaba ensimismado pensando en lo que había sido su negocio hace años. Su cerebro la retrotrae a esa situación y al ver un abismo importante con el actual, acelera situaciones más complicadas de revertir. Siempre focalizamos el objetivo negativo cuando hemos tenido muchos positivos a lo largo de cada día.

Los patrones en el cerebro no deben existir pero existen. Imaginemos en un asunto de un correo lo siguiente: solicitud de reserva. ¿Cuántas personas del sector turístico no cambian su actitud al ver esa frase?. Si, luego resultó ser spam de un tal Pedro Rodriguez que estaba en las Seychelles, pero ese subidón de “pedido”, no lo cambia nadie…Ahora si, cuando lo conoces qué ocurre: ese nombre en un patrón que ya conocemos, que nos provoca sobre algo que no existe pero clave para nuestro negocio, y que nuestro cerebro convierte en algo negativo. ¿o no?.

Ayer estuve trabajando en una mesa de operaciones, y sentí que el patrón del que opera, no estaba sostenido por la cantidad de animales salvados en esa mesa, sino por la cantidad de pienso online que venden los paises del Este a márgenes ridículos. ¿Os dais cuenta cómo el cerebro te ha llevado a mostrarme un producto que te resultó útil pero ahora te utiliza con bajezas que eran el complemento de tu negocio hasta que los piensos de marca blanca hicieron el puente hacia la comercialización desde otros países?.  Solo una pregunta: ¿Con qué producto te quedas en tu mesa de operaciones?. Dilo, tu cerebro te lo agradecerá…….