El turismo imprime una alta exigencia a todo lo que le rodea. Todos los que tenemos algo que ofrecer, turísticamente hablando tenenos una labor muy compleja. La labor de búsqueda de clientes y de implementación de un destino como turístico en el segmento rural es muy complicado, porque no solo tienes que buscar este cliente sino hacerle copartícipe de que tu economía pasa por sus visitas y de su efecto.

Un destino turístico de éxito, es un destino que ofrece una estrategia global de todo lo que afecta a ese destino. Asturias seria invendible si se hablara por un lado de gastronomía, por otro de naturaleza y por otro de patrimonio. No existe la posibilidad de dividir a un cliente para cada situación en determinados destinos turísticos de ámbito muy pequeño. No estoy de acuerdo en como dice Josep Ejarque en su libro sobre Destinos Turísticos que el problema del turismo Rural es la comercialización, la cual será solventada con un acercamiento a los Touroperadores.

Si es verdad que nuestro problema, y lo comenté muchas veces es la comercialización, pero no basada en la estrategia de los touroperadores. No creo que la mayoría de los alojamientos rurales sean rentables por el efecto touroperador. Te pueden ayudar a mejorar tu rentabilidad , pero mi experiencia es que la mayoría de las peticiones que existen para los grandes monstruos de este sector, pasa por los mismos días que tu ya tendrías cubiertos tus alojamientos.

El problema pasa por no conocer a fondo  dos cosas: 1: Como comercializar este sector de una forma global y diferente, y 2: La mentalización del profesional de los alojamientos sobre su efecto en el destino.

El primero es una cuestión de ubicación. ¿Dónde están los clientes?, ¿porqué nos eligen? , ¿qué diferencia la elección de nuestro destino?, ¿porqué el ámbito rural ahora?. Antes nadie nos conocía pero ahora si, ahora todos nos han puesto ojos, boca y nariz, es más , respiramos para el otro lado y somos capaces de mostrar nuestra autonomia. Es más somos un destino tan rural como global. Y es que no es para menos cuando las cifras de la OMT, dicen que más de 750 millones de personas viajan al año.

Para ser globales, los que nos comercializan deben vendernos de forma global, y en lugares globales, o sea algo asi como ALL INCLUIDED, pero teniendo en cuenta que los periodos son muy cortos, ya no existen vacaciones a lo familia Alcántara, que más de uno hicimos hace muchos años en el mes de vacaciones. Este Short breack llamado tiene mucha importancia en la comercialización futura. Es más, es parte del elemento decisivo para que seamos comprados como destino. Se comercializarán muchos destinos basados en este breack o corta duración de todo.Ya no hay tiempo para pararse, se trata de conocer, conocer y conocer. En próximos artículos comentaré como estos pequeños cortos turísticos harán que la comercialización sea más dinámica y como el turismo rural ya no es solo para amantes de la naturaleza.

El segundo implica una sensibilidad no solo hacia el cliente, sino hacia todo lo que rodea a ese destino. El profesional de este sector no solo debe ver su alojamiento como un recurso personal, sino como la contribución al desarrollo de un entorno turísticamente vendible, y el en que el debe colocar todo su interés y conocimiento al servicio de ese destino. Hablamos de un destino global y de éxito. Para ello es necesario que impliquemos de forma proactiva nuestra capacidad para ver que podemos aportar a los clientes, que podemos enseñar a los clientes, como podemos hacer que otros destinos nos tomen de referencia, como sería nuestro concejo sin turismo rural y como sería con un turismo rural más proactivo y comprometido. Es difícil estar a los dos lados del rio, pero casualmente nuestro cliente empieza a estar en uno y en el otro pasa de puntillas, y ya nos ve más que como un alojamiento rural, como un destino turístico. Ojo al dato.