El turismo rural es una actividad que cada vez más turistas eligen. Como tal, podría ser una buena inversión montar una casa rural, es decir, un establecimiento en el que se pueda alojar huéspedes que disfruten de la experiencia de estar en la naturaleza. Sin embargo, para montar una propiedad de estas características es necesario tener en cuenta algunos requisitos que deberás cumplir antes de que puedas alquilarla. ¿Qué se necesita para armar una casa rural?

¿Qué es una casa rural?

Una casa rural, al igual que un hotel o un albergue, es una construcción con fines exclusivamente económicos. Por lo tanto, debe ser inscripta como cualquier empresa. Esta residencia, no solo ofrecerá servicios de alojamiento, sino también servicios complementarios, como desayuno y, por lo menos, tres actividades de ocio, como senderismo, equitación y natación. En cuanto a la construcción de la misma, es importante que cada habitación cuente con baño propio y ventilación al exterior. Así sea individual o doble, debe ofrecer el espacio suficiente para colocar una cama, una mesita de noche, un armario y una silla. Asimismo, la cocina debe estar completamente equipada.

Servicios de la casa rural

La casa rural debe proveer los servicios de electricidad y agua. En cuanto a la electricidad, podría ser una buena idea disponer de paneles solares para aprovechar al máximo la luz del sol. Con respecto al agua, es una buena idea colocar una bomba de riego que proporcione de agua a toda la vivienda. Bomadeague.es tiene buenas alternativas para el uso doméstico de estos aparatos. Por otro lado, también se requieren servicios como calefacción, recogida de basura y ropa de cama.

Permisos y licencias

Cada comuna tiene sus propios requerimientos a la hora de montar una casa rural o cualquier instalación cuya finalidad sea alojar turistas. Por lo general, estos requisitos suelen ser parecidos, pero se recomienda consultar qué es necesario según la zona. En Madrid, por ejemplo, es imprescindible que la vivienda tenga un encargado que se ocupe de la administración general de la casa y se encargue de resolver los problemas o demandas de los huéspedes.

En cuanto a los permisos y licencias, el propietario debe ser persona jurídica e incribir a la vivienda en Hacienda como alojamiento rural. En caso de que se trate de una vivienda ya construida que requiera reparaciones, será necesario conseguir un permiso del ayuntamiento y, dependiendo de la magnitud del proyecto, un visado del Colegio de Arquitectos. Una vez lista la propiedad para comenzar sus operaciones, el ayuntamiento otorgará una licencia de apertura tras pagar las tasas correspondientes.

Una casa rural es un buen negocio, si se tiene en cuenta que cada vez más personas eligen pasar sus vacaciones en medio de la naturaleza. Ofrecer actividades de ocio, los servicios correspondientes y una casa que tenga las instalaciones necesarias harán que puedas empezar con tu nuevo emprendimiento. Si bien los requerimientos varían de comuna en comuna, algo es seguro: una casa rural es una buena inversión.

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