Cada día es de uso más frecuente. En Suecia, las start-ups que crean proyectos compartidos y vinculados al impacto medioambiental son ingentes. Chilenos, Indios, Iraníes, Asiáticos y un importante contingente mundial, se prepara para hacer crecer ecosistemas basados en personas muy preparadas, con conciencia social y capaces de compartir los proyectos en los que trabajan anteponiendo el bienestar al dinero.
Los boletines que reciben de muchos ámbitos y relacionados algunos con turismo, otros no, suponen una importante visibilidad para la sociedad. Ahora compartimos casa, coche, terreno, tiendas de e-commerce y en el futuro serán muchas más cosas porque la sociedad estamos enfermando entre otras cosas por el mal o imposible uso que damos a todo lo que nos rodea. Experiencias que marcan una trayectoria social. Si uno hace bien una tienda de ropa usada, porqué no comprar esa plantilla gratuita y vender tu propia ropa……..Si esa ropa es nueva, porqué no vincular el mejor posicionamiento de cada producto, a unos baremos en función de su respeto con el medio ambiente o con los animales……..
Iremos viendo todo esto poco a poco, pero me llama la atención que los anunciantes en boletines de turismo en España, no son esas empresas sociales mientras que en otros sí. Debemos estudiar a la sociedad tal como estamos sintiendo la necesidad de ser en los próximos años. Esa conciencia social debe ayudarnos a crear nuestros propios mercados y no permanecer fuera del camino que han elegido algo que cambiará y mucho el posicionamiento de los países en los próximos años……..
Juan Otero
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2 Comentarios
Esa es, precisamente, amigo Juan, una de las claves cuya ausencia contribuyó a esta crisis y cuya reaparición nos ayudará a superarla. Y hablamos de la consciencia social, de la consciencia global, de los valores humanos, que se nos han caído, perdido, por el camino, mientras protagonizábamos durante las últimas décadas esa loca y frenética carrera hacia ninguna parte, bueno, sí, era una carrera que no podía llevarnos a otra parte que a esta situación de crisis humanística, económica, política, (…) que vivimos actualmente. Durante décadas confundimos el estado del bienestar con el estado del todo vale y el consumismo desenfrenado. Este monstruo de Franquestein (crisis/cambio) es nuestro propio monstruo, nosotros lo hemos creado y a nosotros nos toca retirarle esa vida artificial que le de dimos de forma tan inconsciente.
Interesante observación optimista, amigo Juan.
Esperemos que se desarrolle y en España terminaremos copiando, ya que el «inventen ellos» sigue perfectamente vigente, pero de momento vamos por otro camino, así en la «avispada» Cataluyna -siempre a la vanguardia- la star-up más interesante y con alto contenido ético como te puedes imaginar, puede ser es una que se llama con minúscula «plataforma contra todo tipo de autoridad» -especialmente si no es catalana, claro-, es fácil encontrarlos por cualquier sitio -especialmente frente a la sede del PP- cortando las calles protegidos por los mossos naturalmente, no vaya a ser que se «manquen».
En España, la generación perdida de la que se habla, lo es por la mala educación recibida, la moral católica no fue sustituida por una enseñanza ética adecuada y no parece que el empobrecimiento ayude a mirar más lejos.
Pero con Internet todo fluye más rápido que en el Éfeso de Heráclito y puede que la estética de la ética nos seduzca.