Durante una semana he estado en USA, viviendo, participando y aprendiendo sobre distintas áreas. He vivido el buen trabajo que hace la organización Hispa  tratando de que los latinos se adapten al sistema teniendo en cuenta que serán una población muy importante en los próximos años. Viví lo que es sentirse Role Model entre personas que hacen una fantástica labor por adaptar a niños que pueden tener posibilidades de estudios superiores y que no se «pierdan», en una escuela de New Brunswick cuya pregunta clave fue: ¿qué destino te gusta más?, a lo que contesté, ninguno. Me gustan las personas, no los destinos….

Estuve en la Universidad de  Princeton varias veces, universidad que figura entre las cinco más prestigiosas del mundo, en la que conocí a gente muy interesante, viviendo incluso el previo al partido contra otra gran universidad. Pasear por su campus es una vivencia altamente recomedable. Cené con Nicolás Fabras Cordero, hermano del ex-presidente de Ecuador, antiguo alumno de Princeton y Presidente de Ecuasal. Participé en un programa dirigido por el Sacerdote Lorenzo Ato, adjunto a la archidiocesis de NYC  en Sirius Radio, radio vía satélite que se está convirtiendo en líder en USA, en la que además de aportar mi visión como emprendedor, viví la diferencia de una radio en España y en USA, amén de escuchar bastante la palabra paracaidista. Interesantes conversaciones con Susana Galli, Manager Director de Global 10 Productions sobre España, cómo implantarse en USA para tener una certera aceptación, o cómo está cambiando la comunicación.

Estuve también a través de César Bandera de Cellpodium, visitando el EDC, la incubadora de startups más importante del país, y con muchas ganas de volver a verla de forma más detenida. Allí conocí a José Rodríguez, puertorriqueño nombrado por Obama, emprendedor hispano del año en USA con su empresa Meritoperations y a Peter Schmitt de SNA-LLC con el que estuve navegando sobre estrategias móviles y de Cloud Computing. Me llamó la atención que eran personas de mediana edad, con proyectos tutelados y que estaban en la incubadora unos cinco años de media. También me llamó la atención los 40 millones de dólares que factura que para ser una incubadora, no están nada mal.

Dos mañanas prácticamente, las dediqué a visitar NYC, y me gustó mucho la dinámica del país. El servicio al cliente es algo realmente envidiable. Es fácil comprar porque siempre hay alguien que te quiere vender algo de buen humor. Es fácil cruzar porque siempre existe interés por parar y dejarte pasar. Es algo raro, porque si eso ocurre a diario y la gente va tan rápido, es porque el sistema funciona…….

Todo gracias a Jorge Escobar, con quien aprendí también sobre varios programas educacionales y uno tecnológico que no he visto al menos hasta ahora en el mercado. No cabe duda de que no será la última vez que vaya a USA, es más, es una recomendación importante para situar la perspectiva de tu vida, eso sí, siempre combinando turismo y empresa, incluyendo mi cumpleaños que esta vez lo pasé entre Continente y Continente.