Podria ser para un negocio que se convierte en inteligente día a día. Hay cuatro canales muy diferenciados en el visitante de turismo, tanto en el proceso de reserva, como en el proceso de llegada al alojamiento. Esos insights, son claves para conocer no solo el porqué de la compra, sino como vas a desarrollar todo el proceso de ubicación. Sexo Masculino, Sexo Femenino, Niños, y Animales.

Como me considero una marca, no puedo permanecer al margen de lo que en esos grupos se piensa. Ayer, dos parejas y dos perros de diferente talla y comportamiento, me ofrecieron la oportunidad de comprobar varias personalidades. La persona que conducía el coche me dejó que yo lo subiera por la estrechez del camino. Uno de los perros me ponía mala cara al subirme mientras otro no decía nada. Una de las chicas no hablaba nada mientras otra sí. Los chicos pensaban en barbacoas y ellas en conexión a Internet. Todos estos insights, los iba conociendo a medida que hablaba con ellos.

Hablamos sobre Social Media y la forma de decidir la compra de producto, y también era 360 grados, porque si no admiten perros, no van a un alojamiento, si no pueden hacer barbacoas no van los chicos, y si no tiene Internet, las chicas no podían hacer una serie de trabajos que tenían pendientes. Cuando digo que la personalidad del cliente, o sea de nosotros, es sumamente compleja, es porque lo monitorizo todos los días. Imaginemos cuatro decisiones diferentes para la compra de producto turístico, vamos una locura.

Cada uno de los empresarios turísticos, debe convertirse en una multiplataforma capaz de desarrollar el negocio turístico en varios canales.  Asturias debe convencer a todos los empresarios en  desarrollar estos estudios más allá de la propia reserva, porque esto, le permitirá ser una referencia en turismo en el futuro. Si queremos dimensionar el negocio turístico, debemos ir mucho más allá de lo que hasta ahora realizan tanto empresarios como instituciones.

Aún recuerdo cuando vender turismo rural  era algo sencillo, algo que no me preocupaba más allá  del alquiler necesario para rentabilizar mis gastos financieros. Ahora, utilizo la tecnología para conocer muchos aspectos que antes no conocía, y radiografío cada situación que ocurre desde la reserva hasta la entrega de llaves. Es mi plataforma para considerar al cliente en un eje del que no se me puede escapar. La venta del producto turístico, sin que el empresario considere su plataforma a diario, no tiene mucho futuro.