El Marketing Rural, Marketing verde o Ecomarketing, está de moda. No solo los Hoteles, sino empresarios de Turismo Rural, y empresas de Tecnología como Google, empezamos a ver el respeto al medioambiente, no como algo interesante para vender, sino como un valor percibido por los turistas como elemento de diferenciación. Juantxo Chantada, nos ilustra en un post muy interesante aunque quizás un poco denso sobre datos y posicionamientos futuros.

Antes de que el viajero mantenga las toallas varios días sin lavar, que no deje correr los gripos, que no tenga el coche encendido mucho tiempo, que no tire a su alrededor materiales de deshecho, y un largo etc., debemos empezar por vernos a nosotros mismos y nuestra actuación en el medio a diario.

Todos somos viajeros, por lo tanto todos seremos ecoviajeros en un futuro no muy lejano. Se empieza a apreciar sobre todo en círculos extranjeros, la proactividad que las personas vinculadas a empresas de turismo hace de este factor. Es más, empiezan a utilizarse criterios de decisión sobre él. Hoy recibía un correo de Ecotur, en Villaviciosa, que empezaba a considerar el turismo de avistamiento de aves, como parte de explotación de negocio turístico. Brillante idea. Cuando comí en Madrid con Antonio Saez de Fon, me comentó que Extremadura había sido la región que más había crecido en este tipo de turista, y era mayoritamiente extranjero. Casualmente son los más concienciados en este asunto.

No sé si será una moda pasajera, aunque creo que no, por la cantidad de Beneficios que tiene y lo que representa como actitud ante el futuro de nuestro planeta. No estaría tampoco de más que hubiera marcas de calidad para establecimientos que tengan un respeto total por el medioambiente, que fueran de validez internacional, y que se empezara a valorar si esta situación abre unas perspectivas futuras de negocio turístico, o es el mismo turista concienciado, lo cual independientemente de tu actitud ante el futuro, contemplaría en microempresas un determinado despliegue monetario y promocional, que se convertiría más en una filosofia que en un business.

Espero ver muchos Ecoviajeros en Asturias, y que demanden en nuestros establecimientos lo que ellos creen que es mejorable para preservar el medioambiente. Es evidente que todo está sujeto a variables económicas, pero sí existen determinados aspectos que pueden ser mejorables, e influyen más en lo exterior que en lo interior, porque al final, uno come con la vista en muchos casos, y tener un exterior digno y un interior coherente, no es cuestión solo ecológica, es cuestión de diseño y de packaging del envoltorio.

Al final, puedes tener un negocio muy vinculado al Ecoturismo, pero necesitas más variables para hacerlo funcionar, y máxime  hoy día donde la oferta supera con creces a la demanda. Hace un momento estuve con Belén, sumiller de Casa Fermin, uno de los mejores restaurantes de Asturias, sito en Oviedo, y me comentaba como los vinos gallegos albariños se vinculaban al cliché ecoturismo, pero ojo, diseños italianos, y envoltorios exquisitamtente cuidados.

Así pues, ecología sí, pero sin descuidar lo que ven los ojos cuando llegan a un alojamiento. Lo que está detras está muy bien, pero hay algo que se llama «amor a primera vista». Verlo desde un lado dogmático y filosófico solo no ayuda a conocer lo que realmente existe detrás. Y de hecho exiten portales en Internet, donde existen muchas casas que de no tienen nada de ecológicas, solo es un reclamo más para vincularte comercialmente al portal. Y es que ya se sabe , la caridad bien entendida empieza por uno mismo.
PD: La foto es de la web de Ecotur, arriba citada.