La media de mis libros empezados es habitualmente de diez más o menos. Ahora se porqué mi amigo Juan Carlos Cubeiro, experto en Coaching, se lee los libros de dos en dos. Siempré pensé que era muy difícil, pero que va. Tienes que extraer por el aire muchas cosas, porque si lo lees como una novela de recreo, te pararás en el análisis y por ello en la parálisis. En los libros técnicos se pueden extraer muchas conclusiones sin “leerlo” entero y decir :buff. este si que puedo decir que lo leí porque fíjate tiene x páginas y ya estoy en la xxx. No, yo no estoy en ninguna, lo analizo según me interesesa, no sé, ni me interesan las páginas que tiene, y si mucho, los contenidos que puedo extraer en cada parte del mismo. Casi casi un twitter lector, donde en muchas páginas, extraes conclusiones vitales.

En los últimos días estoy leyendo, mitad yo, mitad mi mujer, Los Secretos del Club Bilderberg de Daniel Stulin. Stulin es un periodista que investiga sobre este club y es el más destacado en la cobertura del mismo. Acontecimientos como Los Balcanes o Afganistán, el dinero que mueve el tráfico de armas y drogas en el mundo, o productos como los Beattles a nadie se le escapa que no es nada personal, son solo negocios. Personas de alta influencia se reunen periodicamente para debatir sobre el futuro del mundo. Evidentemente, no voy a hablar del libro, que considero muy interesante, sino de la influencia que tiene en otro área de vital importancia para la economía Española, y no es otro que el Turismo.

Siempre me llama la atención el alarmismo que existe en los medios cuando se requiere del mismo. La sensibilidad al convertirnos en familias Low cost, implica que una clase media empiece a replantearse su futuro. Cuando una empresa quiere marcar sus directrices para varios años, lleva a cabo un plan director. Dicho plan no lo conoce nadie salvo sus máximos dirigentes y su propaganda es mínima. Cuando en el mundo globalizado se quieren cambiar opiniones, se lleva a cabo algo similiar que no conoce nadie salvo los máximos dirigentes. La información que llega a la sociedad es la que ellos quieren que llegue, y la situación que se ha creado al abrigo de esa información es la que han promovido.

Cuando baja el turismo, ¿no será que la planificación fue incorrecta en su día? o ¿no será que debido al interés de la banca, se trata de aminorar los gastos financieros para evitar que se produzcan males mayores?, o ¿ no será que la búsqueda de opciones para evitar su peso en la economía deba ser repartida en un futuro con otros sistemas de ocio?, o ¿no será que quieren que cambiemos el mundo como la TV hace al exponernos sus imágenes y todos nos sintamos parte de ese cambio teledirigido?, o ¿no será que existen muchos invisibles a medida que crece esta sociedad más visible?. La situación del turismo en este momento no es diferente a otros. Si es diferente el momento en el que interesa que esto sea diferente.

En una sociedad del ocio que crece exponencialmente, es muy importante establecer patrones de conducta. Una vez nos establecen objetivos inalcanzables, existe un cambio en el comportamiento. Es pura lógica. Nada es espontáneo, todo está controlado y dirigido de forma minuciosa. Cuando la prensa comenta sobre turismo en los puentes no es espontáneo. Cuando la Televisión anuncia determinadas noticias, no es espontáneo. Nada ocurre por casualidad. En el área de turismo, me llama poderosamente la atención, la facilidad que existe para echarnos la culpa unos a otros: que si no hay calidad, que sino somos profesionales, que si existen establecimientos que no son legales. Vale, existe algo de eso, pero ¿esa es la causa real de lo que ocurre en turismo?. Disculparme por mi discrpancia, pero creo que esa es la capa social que nos hacen tragar y que entre todos nos echamos en cara. El futuro va mucho más allá de esa capa.

Siempre es mucho más difícil enfrentarse a lo que tememos que a lo que nos dan digerido. Parece ser que la dificultad está en buscar la solución real, y elegir cual es el camino correcto. El turista seguirá viajando, el PIB seguirá creciendo debido a este sector, el Turismo Rural seguirá teniendo una importante implantación en nuestro país y en otros, pero siempre debemos ver las cosas con una perspectiva libre, autómoma y basada en la analítica. Nuestro plan director en el área turístico es reflexionar sobre que proyectos pueden cambiar, ojo, no minorar, el futuro del negocio turístico. Habra reconversiones, despidos, etc, pero será como dice Estulin, una distinción honorable para el que fue capaz de ver más allá de los ojos, que no es poco.