Ultimamente y por mi contacto con empresarios interesados en invertir en Turismo Rural, me doy cuenta de varias cosas:

1- Turismo rural no es llevar a los clientes de un lado a otro sin planificación, aunque existan atractivos cercanos.

2- Turismo rural no es pensar que tienes muchos amigos y al abrir tu negocio, todos irán corriendo a incrementar tus beneficios.

3- Turismo rural no es pensar que si trabajas en una gran empresa y tienes acceso al mailing de la misma, lanzarás todo tu negocio en un mail que termina en la tecla suprimir.

4- Turismo rural no es conseguir subvenciones para hacer negocios del mismo. Está más fundado en la viabilidad del proyecto, que en todo lo que éstas ayuden al mismo.

5- Turismo rural es pensar en los intangibles, no como en una ubicación al lado de la casa, sino en la mente del consumidor.

6- Turismo rural es comprender la forma de viajar del turista en los próximos años, que no tendrá nada que ver con lo visto hasta ahora.

7- Turismo rural, no es tengo un amigo que queremos, que tenemos en tal sitio, que podríamos. No, Turismo rural es algo más que un verbo, es la oración completa.

8- Turismo rural no es defender en Asociaciones a los malos en detrimento de los buenos. El que no está preparado ni tiene la más remota intención de prepararse, debe ser sancionado y si reincide, arrojado a los leones.

9- Turismo rural no es ver la pantalla del ordenador como la de la tv. Proactividad frente a Pasividad.

10- Turismo rural no es darte de alta en 200 directorios, portales, etc, sin una política online definida.

Y estos son 10, pero os puedo asegurar que podría estar aquí sentado un rato largo. Es cuestión de que a través de todos estos datos, se vaya profesionalizando la categoría que para mí, más futuro tiene en el sector turístico. Eso sí, en el mundo online está su referencia, y esta debe ser muy diferente a como se desarrolla en este momento. Es el momento de ver el semáforo en rojo, y esperar para cruzar.